Cómo conservar el pescado fresco
El pescado es un alimento muy nutritivo que nos aporta muchos beneficios para nuestra salud. Y para disfrutar de un buen pescado fresco, es importante tener en cuenta cómo conservarlo para que no pierda sus propiedades. Hoy desde Cambados, nuestro restaurante gallego en Sevilla, te contamos algunos consejos de conservación para que disfrutes del sabor fresco sin preocupaciones.
El pescado es, sin duda, un alimento muy delicado, y más aún si se trata de pescado fresco. Se estropea con facilidad si no lo tratamos de la manera adecuada. Y lo más importante en su conservación es no romper la cadena de frío, ya que los cambios de temperaturas pueden influir en su estado.
Limpieza del pescado fresco
Este paso es muy importante ya que disminuye el tiempo que tarda en descomponerse. Podemos pedírselo al pescadero o hacerlo nosotros mismo al llegar a casa. Será necesario retirar las escamas, desangrarlo y quitarle las vísceras. Todo ello bajo un chorro abundante de agua fría.
Aunque este proceso se realice en la pescadería, será recomendable volverlo a repetir al llegar a casa. En el camino, el agua que ha escurrido del primer lavado se habrá mezclado con restos de sangre y vísceras. Es muy importante hacer este proceso si lo vas a cocinar inmediatamente.
Conservación en la nevera
El pescado fresco puede aguantar en perfectas condiciones en la nevera durante 2 o 3 días. Para ello, debemos asegurarnos que la temperatura se encuentra por encima de los 0º y por debajo de los 4º. Esa temperatura debe ser constante, por lo que evitaremos abrir y cerrar la nevera de forma habitual y por largos periodos de tiempo.
Y para evitar que el pescado se encharque, no conviene dejarlo en la misma bolsa que traemos de la pescadería. Es mejor envolverlo en un trapo limpio manteniéndolo ligeramente húmedo para que no se reseque nuestro pescado. También es preferible colocarlo en la zona más fría de la nevera.
Congelación
En el caso de que queramos congelar nuestro pescado fresco nada más comprarlo, el proceso de limpieza comenzará una vez esté descongelado. Colocaremos nuestro pescado en una bandeja apta para congelación y lo envolveremos en papel film. Además, no es recomendable congelar juntos diferentes tipos de pescado. Es mejor separarlos en diferentes paquetes para que no se mezclen sus sabores.
Es conveniente descongelar el pescado en la nevera, y no a temperatura ambiente. Esto implica que tendremos que comenzar el proceso de descongelación 24 horas antes de consumirlo. Si lo mantenemos en la parte más fría de la nevera, el proceso será más natural y nuestro pescado mantendrá todas sus propiedades.
Por otra parte, si tu intención es consumir pescado crudo, el proceso de congelación es fundamental. Esto evitará el anisakis, una larva que puede permanecer en algunos pescados y es perjudicial para nuestra salud.
Después de conocer las claves de conservación del pescado fresco, nada te impedirá disfrutar del sabor a mar más puro. Y si quieres disfrutar del mejor género fresco sin preocupaciones, visítanos en nuestro restaurante en Sevilla.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!